Y asi empezo, no importa el acento ni como se dio...
Creia que todo lo que tenia era de el, mas un dia de intensa llovizna lo vio, mas claro que aquellas diminutas gotas de agua al caer, en verdad le importo, se dio cuenta de que estaba vivo, de que podia mirar a la cara a aquel pequeño espejo que siempre se empesinaba en hacerlo sentir mal.
Pero no cambio, se tomo el tiempo que el queria porque se sabia tener el control, y lo miro, y sin importarle el titulo o las comas en este papel lo escribio.
Yo estuve ahi, tratando de hacerle ver su pequeño futuro y el posible error.
Me derribo; con una extraña mirada que jamas en sus ojos haya posado, crei ver leon.
Lo tiene todo listo, el petardo pesado a gramo, el revolver ha llenado y ajustado lleva el cinturon.
Es un hombre decidido, le pedi que encarecido desistiera. Me ignoro.
No le importo nada; no hizo caso aunque adverti sobre las heridas.
Y esque ese hombre lleva en sus manos lo que es mi propia vida.
Y esque ese hombre no es otro inoportuno mas que yo.
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